Crece el cierre de empresas en Colombia
El panorama empresarial en Colombia enfrenta diversos desafíos, entre estos, el
aumento en el cierre de empresas. Entre 2019 y 2023, el cierre de empresas creció a una
tasa anual compuesta del 4,84%, con un promedio de 234 mil empresas cerradas por año,
mientras que la tasa anual compuesta de creación de empresas fue de -1,45%, alcanzando
un promedio de creación anual de 339 mil. En 2023, los cierres aumentaron un 15%, en
tanto que la creación de nuevas empresas cayó un 9%. Esta tendencia continuó en los
primeros siete meses de 2024: fueron 246 mil las empresas que cerraron, superando las 212
mil creadas.
La literatura sobre dinámica empresarial identifica dos tipos principales de determinantes, tanto para el cierre como para la supervivencia: internos y externos. Entre los factores internos, se encuentran características propias de las empresas tales como el tamaño, la edad, la estructura financiera, el acceso a crédito, la inversión en I+D, la capacidad innovadora, las habilidades gerenciales y la participación en mercados internacionales. Por otro lado, los factores externos incluyen elementos como la ubicación geográfica, el nivel de competencia en el mercado, la integración en clústeres productivos, los ciclos económicos y las políticas gubernamentales, como subsidios y créditos. Estos determinantes proporcionan un marco para analizar los principales desafíos que enfrentan las MiPymes colombianas. A continuación se desarrollan algunos de estos, en los que una buena gestión financiera es clave.
1. Acceso al crédito para impulsar la sostenibilidad
Uno de los principales retos para las MiPymes durante 2022-2023 fue financiar sus
operaciones y proyectos. El 75% de estas empresas no accedieron a créditos en este
período, citando altos intereses o procesos complicados. Muchas optaron por depender
exclusivamente de sus propios recursos o de los de familiares, lo que las expone a riesgos
innecesarios limitando su capacidad de enfrentar imprevistos o crecer. Garantizar el acceso
a crédito no solo permite superar dificultades de liquidez, sino también facilita la inversión
en áreas estratégicas sin comprometer la estabilidad del negocio.
2. Formalización como ventaja competitiva
La informalidad continúa como una barrera significativa para las MiPymes. Durante el
periodo 2022-2023, un 35% de las microempresas no contaban con registro mercantil, el
20% carecía del RUT y el 30% no tenía NIT. Además, entre un 40 y un 50% no cumplían con
los requisitos de seguridad social. Estas limitaciones no solo restringen el acceso a beneficios
fiscales y financieros, sino que también afectan su reputación ante clientes, socios y demás
partes interesadas. La formalización, además de ser un requisito legal, es una herramienta
poderosa para mejorar la estabilidad y proyectar una imagen confiable en el mercado.
3. Invertir en tecnología para aumentar la competitividad
La falta de inversión en tecnología y maquinaria es otro factor que limita la
competitividad de las MiPymes. Durante 2022-2023, el 48,2% de estas empresas no invirtió
en maquinaria, equipo ni tecnología, lo que impacta de forma directa su productividad y
capacidad de respuesta ante los desafíos de un mercado competitivo. Esta falta de
modernización genera procesos menos eficientes, mayores costos operativos y una menor
capacidad de competir frente a empresas más avanzadas. AL priorizar inversiones
tecnológicas, las MiPymes pueden reducir costos, mejorar la calidad de sus productos y
servicios, y mantenerse relevantes en un entorno empresarial cada vez más exigente.
4. Explorar nuevos mercados para diversificar riesgos
El alcance limitado de las MiPymes en Colombia durante 2022-2023 es un reto
significativo. Según estadísticas recientes, el 95% de estas empresas no exporta y concentra
entre el 65% y 70% de sus ventas en su municipio de operación. Aspecto que limita su
capacidad de crecimiento y las hace vulnerables a las fluctuaciones del mercado local. Para
diversificarse, las MiPymes deben superar barreras como la falta de recursos para obtener
certificaciones, la implementación de estrategias de marketing y la logística de distribución.
A pesar de estas dificultades, expandirse a nuevos mercados nacionales e internacionales
puede abrir oportunidades significativas, reducir la dependencia de un único mercado y
fomentar la sostenibilidad a largo plazo.
Construyendo un futuro sostenible para las MiPymes
Con base en lo anterior y la dinámica de cierre de empresas en el país, el
fortalecimiento de las MiPymes colombianas requiere estrategias que les permitan a tales
superar los desafíos actuales. El acceder a crédito, formalizarse, invertir en tecnología y
buscar nuevos mercados son acciones fundamentales para su sostenibilidad. Estas medidas
no solo reducen riesgos, sino que también les permiten aprovechar oportunidades y
garantizar su permanencia en el mercado.
En este contexto, el análisis y la gestión financiera son herramientas indispensables
para desarrollar estas estrategias de manera efectiva. Una adecuada planificación financiera
permite optimizar recursos, gestionar la liquidez, garantizar el cumplimiento de obligaciones
tributarias y laborales, y priorizar inversiones estratégicas en tecnología, formalización y
diversificación de mercados. Dichas herramientas también proporcionan información clave
para evaluar riesgos, mejorar la toma de decisiones y proyectar una imagen confiable ante
clientes e inversionistas, principalmente. Las MiPymes al fortalecer sus capacidades
financieras reducen su vulnerabilidad y aumentan sus posibilidades de crecimiento
sostenible.
Fecha: Enero 15, 2025
Por: Kendell A. Piñeros Haiek, CEO de KPH Consultores SAS
Bibliografía: Ministerio de Comercio, Industria y Turismo; Confecámaras; La República